Alcalde destaca localización de Carolina como baluarte para su desarrollo económico

02 Nov
(Foto/Suministrada)

CAROLINA – La misión era clara, potenciar aun más el distinguido sitial que poseía Carolina y convertirla en una Ciudad más vibrante y atractiva para los ciudadanos, residentes, inversionistas y turistas. Es por que el Alcalde José Carlos Aponte emprendió un plan estratégico cuyo norte era aprovechar al máximo la excelentísima posición geográfica de Carolina.

          “Carolina es sin duda la puerta de Puerto Rico al mundo. Su localización tiene las bondades de una zona rural rica en naturaleza, con una vibrante zona urbana y con las ventajas que otorga el ser parte de una costa maravillosa. Por tal razón, en 2007, iniciamos un Plan Estratégico que hizo a Carolina atractiva para la inversión. La belleza visual, los servicios y la seguridad fueron los tres aspectos que estratégicamente impulsaron el progreso de Carolina en medio de una crisis económica”, explicó el Primer Ejecutivo Municipal.

          Para lograr su cometido en la costa y zona turística, se inauguró el Centro de Servicios Municipales de Isla Verde, con una inversión de $11.3 millones. Además, se iniciaron labores de remodelación de la Avenida Isla Verde, a un costo de $15.8 millones. Los trabajos se concentraron en la reconstrucción de los encintados y aceras, con losas resistentes al tráfico.

También, se invirtió en la seguridad de los transeúntes y visitantes con la instalación de cámaras de seguridad monitoreadas las 24 horas; remplazando el alumbrado público con postes nuevos; e incorporando luminarias de dos niveles, sin olvidar el ajardinamiento de sus áreas verdes.

Actualmente, las labores de remodelación se retomaron y se concentran en todo el mobiliario urbano de Isla Verde, incluyendo las paradas del transporte público. Estos espacios multifuncionales servirán, además, como una fuente de ingresos adicionales, al instalarle modernas pantallas publicitarias de alta definición. 

El Balneario de Carolina es otro de nuestros distinguidos atractivos turísticos. Tras el paso del huracán María, resultó seriamente afectado, por lo que invertimos $1.5 millones adicionales para remodelar los 36 gazebos del Balneario, reforzando su estructura con anclajes en acero inoxidable y tejas asfálticas. Además, las 10 torres de salvavidas que mantiene el Balneario fueron reconstruidas para garantizar la seguridad de los bañistas. La reconstrucción del Balneario también incluyó el soterrado del sistema eléctrico, mejoras a la iluminación, el acondicionamiento del asfalto en el área de estacionamiento y la construcción de losas de hormigón en el área administrativa.

“Estas labores de reconstrucción en tiempo récord nos hicieron merecedores una vez más, es decir, por 14 años consecutivos, del prestigioso galardón Bandera Azul, logrando ser los únicos en el Caribe que este año ostentan esta máxima etiqueta ambiental”, destacó Aponte.

Otro proyecto que ha hecho de Carolina una Ciudad autosustentable son los Parques Aquasol que, en un inicio, tuvieron una inversión de $5.2 millones. Tras el huracán María y en febrero pasado, se reabrió el Aquasol de Barrazas, realizando mejoras en el sellado de la estructura y reparando algunos de los juguetes. Asimismo, en abril y a un costo que sobrepasó los $500,000 reabrió el Aquasol ubicado en el Balneario. Además, y justo para la temporada de verano, en junio abrió las puertas nuevamente el Aquasol del Parque Julia de Burgos con una inversión de sobre $400,000.

El Museo del Niño es otro gran proyecto de desarrollo económico que ha redundado en un éxito incuestionable, inaugurado en diciembre de 2011 con una inversión de $40.3 millones. El éxito del Museo fue tan extraordinario, que en 2012 se creó el Fondo Especial Gigante Mío que utiliza el 5% del ingreso bruto generado en la venta de boletos para otorgar donativos y diferentes tipos de ayuda a niños carolinenses. No tardó mucho tampoco, en añadirse nuevas fases, como el Mini Zoo, los botes de pedales y la paseadora. Tras el huracán María, el Museo se reparó en tiempo récord, con una inversión que sobrepasó los $800,000, logrando reabrir sus puertas justo a tiempo para celebrar su sexto aniversario. 

“Es evidente que Carolina ha podido desarrollar el valor de su entorno en todas sus áreas. Pero lo más valioso, sin duda ha sido el deseo de los carolinenses de reinventarse y de echar pa’lante en contra de las dificultades”, finalizó Aponte.