Jayleen Rodríguez
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FAJARDO- Tras ocho años de elecciones ininterrumpidas, el alcalde de Fajardo, Aníbal Meléndez, asegura que su mayor logro como funcionario público ha sido enderezar las finanzas del municipio costero, dejándolo en su último cuatrienio con el superávit más alto de todo Puerto Rico, según los documentos fiscales.

Su carrera como alcalde comenzó a sus 32 años cuando, de la mano de su esposa y primera dama Diana Méndez de Meléndez, ganó las elecciones del año 1988 con una visión administrativa, ya que en sus años de universidad estudió administración de las agencias públicas y las privadas.

“Conmigo siempre van a poder contar”, Aníbal Meléndez Rivera, alcalde de Fajardo

“Al llegar a la silla me encontré con un desmadre económico, seguido de un embargo por el gobierno federal de $16 millones, porque el anterior alcalde les cobraba el seguro social a sus empleados, pero no los depositaba en la cuenta correspondiente, sino que los depositaba en la cuenta regular y los usaba para gastos generales”, narró.

En ese primer cuatrienio, además del embargo, llegó el huracán Hugo que, según el alcalde, fue positivo para las finanzas del municipio.

“Viéndolo desde el punto de vista administrativo fue positivo para las finanzas del pueblo ya que las ayudas de la Administración Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA, por sus siglas en inglés) llegaron rápido y hubo un flujo de dinero que nos ayudó a poner las finanzas en orden”, enfatizó Meléndez.

El alcalde expresó “siempre he creído que cuando tú quieres lograr cosas buenas tienes que ponerte metas altas, porque al ponerte metas más altas trabajas más, te esfuerzas más y le dedicas más tiempo”.

Aunque confesó “no pensé durar tanto, me había propuesto unas ideas de como ir desarrollando Fajardo, a corto, mediano y largo plazo a veces me proponía metas demasiado altas, creía yo que eran muy altas, pero con la ayuda de una primera dama extraordinaria y la de Dios volvíamos y repetíamos”, refiriéndose a cada reelección.

A modo jocoso la primera dama contó que en los primeros 10 años que Aníbal fue alcalde, no cogió un día de vacaciones, y en ese tiempo los hijos ya estaban grandes, por lo que le solicitó tomara un descanso.

“Aníbal siempre ha sido un ávido lector, uno de los cuentos que más le ha influenciado ha sido el de la chicharra y la hormiga, que mientras la chicharra cantaba la hormiga continuaba trabajando y siempre quiso ser como la hormiga que en los momentos de bonanza se mantuvo trabajando y así cuando vinieran los tiempos difíciles tenía reservas y por eso que logró mejorar las finanzas del pueblo”, explicó Méndez de Meléndez.

A diferencia de la diligencia que tuvo FEMA cuando vino (el huracán) Hugo, con el huracán María las ayudas no llegaron rápido.  Inclusive, a dos años del suceso, aún el ejecutivo municipal está esperando el dinero de rembolso por los daños que ocasionó María en el coliseo Tomás Dones, donde justo cuando llegó el huracán estaba por comenzar la temporada de baloncesto superior. En el mismo se invirtió $2 millones en la reparación de la cancha, y detrás venía la temporada de béisbol Doble A donde se completó la inversión de casi $3 millones.

Motivación para continuar sirviendo

La motivación que impulsó a Aníbal a continuar lanzándose como alcalde ha sido el apoyo y el amor de su gente, según narra. “Todos sabemos que los políticos incumbentes o no incumbentes estamos expuestos a críticas, pero cuando empezamos todos los comentarios eran positivos, vamos a ti, estamos contigo y eso me impulso a lanzarme como alcalde”, contó el alcalde.

La primera dama, a su vez, aclaró que Aníbal era una persona bien conocida porque había sido profesor de universidad por varios años, apoderado del equipo de baloncesto y formaba parte de las transmisiones en vivo de los partidos que se celebraban en el (coliseo) Tomás Dones. 

Méndez agregó que la gente siempre se pregunta cuál es la mejor obra que ha hecho el alcalde. “Muchos pensaban que eran alguna de las obras, porque en ese primer cuatrienio se hicieron coliseos, edificios y muchas obras, pero no, Aníbal siempre respondía que su mayor logro había sido enderezar las finanzas del municipio y eso le ganó el respeto y cariño del pueblo, además de que aquí no hay colores, se le sirve al pueblo por igual”, manifestó la esposa del alcalde.

Durante los pasados diez años, Fajardo ha sido calificado con nota de A, por la Oficina del Contralor de Puerto Rico, y, según la primera dama, hace tres años se denominó el municipio con mejores finanzas de toda la isla.

“Con el pasar del tiempo nos hemos convertido en parte de la familia caridura, a veces cuando salimos a la calle los jóvenes le pide la bendición a Aníbal porque para los fajardeños la palabra Aníbal es sinónimo de alcalde no han conocido a otro alcalde que no sea Aníbal, y es una experiencia hermosa”, dijo Méndez.

Como parte del apoyo hacia los jóvenes, la primera dama destacó el desarrollo de las Bellas Artes en el municipio, especialmente de la creación de una escuela de esa índole, pues no había un centro educativo que impulsara la expresión artística en Fajardo.

“Acabamos de celebrar 20 años de nuestra Escuela de Bellas Artes y por muchos años las expresiones artísticas eran exclusivas para niños adinerados, niños de San Juan, y nuestro pueblo no tenía ese tipo de cultura y ese siempre fue un sueño: implementar una escuela donde los niños y jóvenes fajardeños pudiesen expresar su talento. Hoy tenemos una de las escuelas de Bellas Artes más completas en Puerto Rico”, expresó Méndez.

Por su parte, para el alcalde, quien comenzó a sus 32 años y culmina como alcalde luego de ocho cuatrienios (32 años), “el tiempo pasa rápido”.

“En Puerto Rico, la burocracia a veces te obstaculiza el crecimiento y desarrollo económico de los municipios, por eso pienso que los cuatrienios deberían ser de seis años, porque los primeros dos años se te van en planificación, en buscar propuestas, buscar ayudas disponibles y en el tercer año se comienzan a ver los frutos y más aún si el municipio está en las condiciones en las que yo encontré este municipio”, puntualizó.  

A su vez aseguró que su hijo, José Aníbal ‘Joey’ Meléndez, será quién ocupará su silla una vez se retire.  “Ya para cuando mi hijo comience a ser alcalde, porque estoy seguro de que va a ganar, las cosas van a ser distintas porque él va a encontrar un municipio sólido económicamente, que él no va a tener que esperar esos dos años, él se va a sentar aquí y rápido va a comenzar a trabajar porque incluso va a encontrar proyectos que ya van a estar en desarrollo”, dijo Meléndez.

Luego de haber desarrollado una carrera como servidor público destacó que se retira como alcalde, pero siempre estará disponible para su pueblo. “El que es el servidor público de todo corazón no va a abandonar ese servicio porque ya no está en la posición o por la razón que sea, yo nací para ser servidor público y voy a continuar siéndolo dondequiera que sea, así que conmigo ustedes siempre van a poder contar”, comentó Aníbal, a modo despedida.

Ya el primer ejecutivo municipal tiene varias ofertas de trabajo, una vez culmine como alcalde. Una de ellas es regresar a la universidad, pero en calidad de profesor. Sin embargo, se inclina más por tomarse un descanso y aprovechar para realizar ejercicios.

“No sé si sea envolverme en más trabajo porque realmente yo soy fanático del ejercicio y quizás ese sea el momento perfecto para levantarme por la mañana a hacer ejercicios y después buscar a mi esposita para llevarla a comer”, dijo entre risas.

Del mismo modo, Diana Méndez comentó que “ mi hijo va a ser el próximo alcalde y yo voy a estar aquí para ayudarle y continuar ayudando a mi pueblo. Las puertas de mi corazón, de mi oficina y de mi casa siempre estarán abiertas para todo lo que el pueblo necesite”.