Por: Redacción Presencia
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SAN JUAN- Ya llegó la temporada de radicar las planillas o como suelen llamarle, “la dolorosa”. Y aunque muchos piensan en ¿cuánto deben pagar? o ¿qué les sobra? en esta ocasión puedes hacer una aportación diferente y única.
Resulta que el Programa del Estuario de la Bahía de San Juan, solicita a los contribuyentes que aporten parte de su reintegro de las planillas de este año, para conservar este ecosistema crucial para todo Puerto Rico, y proteger especies en extinción como el tinglar y el manatí antillano.
El donativo de parte del reintegro es posible gracias a la Ley Núm. 48 de 2009, que incorporó un encasillado especial en las planillas, la “Aportación al Fondo Especial para el Estuario de la Bahía de San Juan”. Éste se encuentra, en las planillas en la línea 1 B de la Forma Única 2013.
El dinero servirá además para un proyecto de urbanismo y creador de un corredor silvestre. En edificios en ruinas en la Ponce de León, habrá murales alusivos a temas ambientales, con el fin de educar a la población sobre la urgencia de conservar el Estuario. Estas estructuras se convertirán en jardines, para aumentar la biodiversidad y producir alimentos.
El PEBSJ, una organización sin fines de lucro, emplea el lema “cada centavo cuenta”, para concienciar de que aportaciones como $2.00 pueden costear árboles como mangle rojo. Éstos limpian el aire, sirven de hogar para las aves y protegen infraestructura costera durante huracanes y el amenazante aumento del nivel de mar.
Cabe destacar, que a finales del año pasado, la Laguna del Condado se convirtió en una reserva estuarina. Esto creó un plan especial de manejo y conservación en coordinación con el Programa del Estuario de la Bahía de San Juan.
Uno de esos planes de conservación, es el proyecto “La Laguna del Condado es mi hogar: Cero basura en nuestros cuerpos de agua”, del Programa del Estuario de la Bahía de San Juan en Alianza con la NOAA. Los jóvenes voluntarios llevaron a cabo una limpieza el pasado sábado, 25 de enero, en la playita localizada al final de la marginal de la Baldorioty de Castro.
El Estuario de la Bahía de San Juan, es el punto de encuentro de las aguas dulces con las aguas saladas, comprende ocho municipios del área metropolitana, con las cuencas de los ríos hasta la costa que se extiende desde Toa Baja hasta Loíza.
Además de su inmenso valor ecológico, el ecosistema es fundamental para el desarrollo económico y la seguridad alimentaria, pues por éste entran los alimentos en embarcaciones y se lleva a cabo gran parte de la actividad comercial del País.