Opinión: “Cuando el sabio señala la luna, el necio se queda mirando el dedo.”

02 Feb

Juan José Díaz Díaz
Especial para Presencia

Hace unos años, una vecina de mi papá conversaba sobre política con algunos muchachos de la comunidad, y dijo una frase que nunca olvidaré; “Yo no podría vivir bajo la Estadidad. Por mi madre, que si llega la Estadidad, me mudo pa’ Nueva York.”

Juan José Díaz Díaz. (Foto/suminsitrada)

Por supuesto, que a los lectores de Presencia no hay que explicarles por qué lo anterior constituye una mezcla de politiquería con moronería, pero lo traigo, porque me parece que muchos de los problemas en este precioso archipiélago, son producto de esa misma mezcla de politiquería con moronería. Veamos, por ejemplo, el asunto de la Reforma Laboral.

En los últimos días, he escuchado a muchísimas personas decir que “por culpa de la Reforma Laboral del Gobernador, Ricardo Rosselló, tendrán que comprar un pasaje, y mudarse a buscar trabajo en Florida.” De hecho, algunos, como un familiar de mi esposa, de esos a los que les encanta filosofar, nos preguntó si la Reforma Laboral es algo que nosotros querríamos para nuestros hijos. Pues sí, yo sí, y no solo les explicaré por qué la quiero para mis hijos, sino por qué pensar en mudarse a buscar trabajo en Florida, tras la aprobación de la Reforma Laboral, es un disparate.

En primer lugar, tenemos que poner en perspectiva lo que existe aquí, versus lo que existe en Florida y otros estados de la Nación, en términos laborales.

En los Estados Unidos existe el Fair Labor Standards Act (FLSA), en español, la Ley de Normas Justas de Trabajo, que no obliga a los patronos a pagar por vacaciones, días feriados, terminación de empleo, ni por enfermedad. Tampoco obliga a pagar extra por trabajar días feriados o domingos. Ni siquiera obliga a dar bono de Navidad. Las empresas que lo dan, es porque quieren, y no porque la ley se los exija. Sí, leyó bien, y si no me cree, entre a www.dol.gov y léalo usted mismo, pues los artículos están disponibles tanto en inglés como en español.

Entonces, cuando una persona dice que se irá para el estado de Florida, “por culpa de la Reforma Laboral”, está diciendo que prefiere trabajar donde la ley no le garantiza bono de Navidad, ni vacaciones, ni días por enfermedad, en lugar de trabajar aquí, con todos esos derechos, y muchos más. ¿Hace esto algún sentido? Usted sabe la respuesta.

En segundo lugar, este asunto de que si me dan solo 6 días de vacaciones al año, moriría de sufrimiento, pasa por alto que esos días son laborables, y que son el mínimo que acumularías. Me explico; es como cuando hablamos del salario mínimo. Todos sabemos que, actualmente, es de $7.25 por hora. Sin embargo, hay muchísimos patronos que pagan más que eso. Pues, con las vacaciones, los días por enfermedad, y otros beneficios regulados en la Reforma Laboral, es lo mismo. Se trata de parámetros mínimos, que no impiden a los patronos ofrecerlos a mayor escala, según su solidez económica.

En tercer lugar, la Reforma Laboral aumenta los beneficios por desempleo, otorga más derechos a las madres lactantes, promueve y protege nuestros empleos… ¿saben dónde? Aquí, en Puerto Rico. Pero bueno, de nuevo, no me crea a mí. Lea, instrúyase, y verá que la Reforma Laboral es buena para Puerto Rico.

Claro, usted se preguntará que, si todo lo que he explicado sobre la Reforma Laboral es cierto, ¿por qué hay tanta gente protestando? Bueno, porque hay personas que no leen ni analizan y, cuando lo hacen, buscan en el lugar incorrecto. Es que, como dice una de mis frases favoritas: “Cuando el sabio señala la luna, el necio se queda mirando el dedo.”