En exclusiva: Crece la Diócesis de El Yunque (Ve la galería)

19 Aug

Por Héctor J. Álvarez Colón
hector.presencia@gmail.com

FAJARDO – En tiempos de crisis y de estrechez económica, muchas personas acuden a las iglesias en busca de aliento o para simplemente encontrar la paz. Durante siete años, el obispo de la Diócesis de Fajardo – Humacao, Eusebio Ramos Morales, ha tenido la ardua labor de pastorear una región cuya fe católica no era la más abundante en ese entonces (2008).

Eusebio Ramos Morales, obispo de la Diócesis de Fajardo – Humacao. (Fotos por Héctor J. Álvarez Colón)
Eusebio Ramos Morales, obispo de la Diócesis de Fajardo – Humacao. (Fotos por Héctor J. Álvarez Colón)

“Era una región que no tenía cabeza jerárquica de la iglesia católica.Me dan la misión, me la encomiendan… Entonces significa comenzar a pastorear la región con unas particularidades. La única región donde había disminuido la feligresía católica era esta. Es una diócesis de parroquias pequeñas y prácticamente con cierto grado de pobreza; no tienen muchos recursos. Tampoco tenía la estructura que debía tener una diócesis: hablamos de una sede episcopal, misiones, pastoral, oficinas. Normalmente en las diócesis uno pastorea la fe que tenemos, pero aquí no, aquí había que sembrar la fe, reevangelizar”, sostuvo el Monseñor.

Actualmente, la Diócesis de Fajardo – Humacao invirtió $1.5 millones para la construcción de lo que será la nueva sede episcopal en Fajardo. La misma albergará la parte administrativa, pastoral y oficinas que brindarán servicios a la comunidad. Esta se encuentra ubicada en las inmediaciones del Colegio Diocesano Santiago Apóstol en Fajardo.

“Queremos crear una pastoral social, como proyecto que atienda a adictos, alcohólicos, enfermos y ancianos. Dentro de este proceso de fundación, hemos contribuido con distintos servicios a familias pobres. Aquí (en nuestra sede) viene mucha gente a pedir colaboración para pagar el servicio de luz yagua, así como para compra de alimentos, y se les provee una ayuda”, dijo el obispo de la diócesis que  cubre los pueblos de: Loíza, Canóvanas, Río Grande, Luquillo, Fajardo, Ceiba, Naguabo, Vieques, Culebra y Humacao.

Sin embargo, Ramos Morales aseguró que cada parroquia debe atender a las personas que así lo necesiten, ya que el obispado es la estructura que vincula las parroquias, pero quien da el servicio inmediato y están más cerca de la gente, son las parroquias.

“Hemos creado un fondo para las parroquias pobres. En cada pueblo hay barriadas y comunidades pobres  y es algo que debemos atender. Deseamos que una vez tengamos una estructura y tengamos un plan más concreto, poder responer con más urgencia a la persona que así lo requiera”, indicó el líder católico.

 No avala el matrimonio homosexual

En cuanto a la determinación del Tribunal Supremo de los Estados Unidos, que determina es inconstitucional prohibir el matrimonio entre una pareja del mismo sexo, el monseñor Eusebio Ramos Morales admitió que la iglesia católica acoge al homosexual, pero no acepta el matrimonio entre ellos.

“El matrimonio tiene una finalidad, un llamamiento de Dios, que es unir a un hombre y a una mujer para generar la vida. Asimismo, la persona humana requiere la presencia de papá y mamá porque esa es nuestra constitución y esa es la forma natural de vida. Que no se déa veces, no quiere decir que aquello, que es el origen, está mal. Por esas dos cosas, precisamente, no podemos aceptar el matrimonio homosexual como una reivindicación de derechos humanos”, explicó Ramos Morales.

“Respetamos el que entienda que ese es su llamado o su razón de ser, pero la iglesia establece el matrimonio de ley natural (creado por Dios) donde se prolonga y se genera la vida para que los padres eduquen a los niños y cuando hablo de padres, es papá y mamá”, añadió.

Construcción de la nueva sede Episcopal de Fajardo – Humacao