Festín de Acción de Gracias

12 Nov

Por: M. Linares de Cano
Propietaria de repostería cibernética
www.messykitchengoodies.com

Parte 1: Ensalada de arúgula, peras y nueces

Parece que fue ayer cuando me encontraba planificando y escribiendo las recetas del Día de Acción de Gracias del año pasado. ¡Han notado cómo el tiempo vuela! Aquí estamos otra vez, preparándonos para ese momento cuando nos sentemos como pachá de un imperio a comer y celebrar el día de acción de gracias.

Este año tengo la visita de mis suegros y familia de mi esposo, que viajarán de bien lejos para compartir en nuestra mesa la oportunidad de dar gracias en familia. Esto lo que significa es que me estoy rompiendo la cabeza para ver qué vamos a hacer que sea digno de un festín.

Mientras me encontraba planificando el menú escucho a mi esposo hablando con mi suegra por teléfono y diciéndole: “quien cocina soy yo”, no sin antes terminar el comentario con esa sonrisa de “Parece mentiras que tú pienses otra cosa”. ¡Casi se me cae el iPad de las manos! Le digo: “Sé específico”, y me despachó con la mirada y sonrisa del que no escucha bien. A lo que él se refiere es a que él se encarga del pavo que por razón desconocida nunca ha sido menester de mi interés.

Demás está decir que de la conversación surgió que mi suegra va estar en la cocina ayudando a su hijo que es el que “cocina la cena”.

El cocinero me dejó dos opciones: pelear (eso no va a suceder, pero lo pensé) o continuar con el proceso de planificación y aprovechar la oportunidad para pedirle a mis suegros que traigan ingredientes que no puedo encontrar en Puerto Rico. Así que me fui por la opción más sabrosa e inmediatamente hice una lista de ingredientes y gustitos bien ricos que harán de esta cena algo bien rico. Así que aquí comparto la receta de la primera fase de la cena: ensalada. No hay excusa para no hacer esta ensalada, es fácil, rica y las personas quedan maravillados de que una combinación tan sencilla produzca un resultado tan placentero al paladar.

Rinde para ocho personas

8 tazas de arúgula

2 peras Bosh picadas en lascas longitudinales, quitar las semillas y tallos, pero dejar la cáscara. Tienes que remojar las peras en jugo de limón para que no se tornen moradas

4 oz de queso parmesano rallado bastante grueso

4 oz de praline de nueces (son la nueces que tienen como una capa de azúcar crujiente y las puedes conseguir en el supermercado o en la farmacia)

2 onzas de cebolla frita (se encuentran en bolsitas justo en el aérea de ensaladas del supermercado)

Aderezo

2 cdas de vinagre de manzana, champaña, balsámico o jerez

4 cdas aceite oliva extra virgen

1 cdta de mostaza gruesa y si tiene horseradish mejor (es picantita)

Sal gruesa a gusto (empezar por una pizca)

Pimienta blanca molida o negra

Azúcar negra (empezar por 1/2 cucharadita)

Mezclar todos los ingredientes del aderezo menos el aceite, luego de ajustar el sazón entonces mezclar todo con batidor manual mientras se le incorpora el aceite lentamente en un chorrito, cosa de que se forme una emulsión. Una emulsión es cuando unimos dos sustancias que no mezclan pero a través de rápido movimiento podemos incorporar pequeñas gotitas de un líquido en otro y crear una mezcla pareja.

Una vez creas la emulsión viertes un porción en las hojas de arúgula y las cubres bien con el aderezo. Luego acomodas las lascas de peras sobre la arúgula, las nueces sobre las peras, el queso lo repartes sobre las nueces y por último las cebollas fritas. El resto del aderezo lo puedes poner en un pequeño recipiente con una cucharadita para que puedan servir más sobre la ensalada a quien así lo guste. ¡Yum!