Redacción Presencia
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Tras el paso directo del huracán María por Puerto Rico, son muchas las personas con diferentes condiciones de salud que se están preparando no solo para recibir lluvias y vientos, sino, también, para lidiar con que estarán sin el servicio de energía eléctrica por varios días. Esto afectará, específicamente, a miles de pacientes con condiciones respiratorias en la isla.

El doctor Luis Nieves Garrastegui, presidente de la Sociedad Puertorriqueña de Neumología y miembro de la Asociación Puertorriqueña del Pulmón, habló en exclusiva con Presencia sobre los peligros a los que se enfrentan los pacientes con condiciones respiratorias, ante el paso de un fenómeno atmosférico. De igual manera, hizo varias recomendaciones para tomarlas en consideración al momento de que se vaya la electricidad en los hogares.

“Imagínate que tú tengas un problema respiratorio donde sientas que alguien te está tapando la boca y la nariz al mismo tiempo y tú no puedas respirar. Y, encima de eso, la alternativa que tienes para el tratamiento es una máquina que te proporciona una terapia respiratoria, pero no hay electricidad para que funcione. Con el paso del huracán Irma hubo gente que entre las ráfagas de viento salían a la calle con la máquina en la mano (especialmente ancianos) para ver dónde podían enchufarlas en el patio”, explicó el neumólogo quien sostuvo, además, que con el paso de un huracán el polvo, hongos y los virus se propagan más rápido causando casos de averías respiratorias, bronquitis e infecciones virales.

Como medida de prevención y sustitución de la máquina de terapia respiratoria, el doctor recomienda los medicamentos y otros artefactos que bien pueden ayudar en la emergencia.

“Hay unas bombitas que uno las conecta a un tubito que se llama ‘chamber’ (una cámara). En un extremo tiene un orificio donde pones la bombita y en otro se pone la boquilla para uno inhalarla. Te pones la boquilla en la boca, presionas la bombita que está al otro extremo y el medicamento sale dentro de ese tubo. Eso es totalmente igual que una terapia respiratoria eléctrica”, manifestó  Nieves Garrastegui.  

Asimismo, se recomienda que de tener problemas respiratorios analice acudir a un refugio o a casa de un familiar cercano que tenga planta eléctrica. De esta forma, puede conectar su máquina respiratoria durante el paso del huracán.

Aunque no hubo muertes registradas por problemas respiratorios, ante el paso cercano del huracán Irma, Nieves Garrastegui recalca la peligrosidad del ahora huracán María, especialmente por el efecto que tendrá en el servicio de energía eléctrica. El neumólogo recordó el huracán Katrina el cual afectó -en el 2005- al estado de Nueva Orleans, dejando zonas sin servicio de energía por hasta seis meses. Por lo que advierte a los pacientes con condiciones respiratorias a tomar las medidas preventivas necesarias.

“El ambiente se contamina más con las plantas eléctricas con diésel y gasolina, así como con los escombros que contaminan el aire. Eso redundará que si tienes que salir de tu hogar, debes salir con una mascarilla. El problema está luego del huracán, porque las personas salen rápido a trabajar con sus plantas eléctricas”, dijo.  “Si usted tiene problemas severos respiratorios o alergias nasales, el mero hecho de echarle diésel o gasolina a una planta eléctrica, después del huracán, aumentan el riesgo de sufrir mayores daños en su condición  respiratoria”, agregó el neumólogo.

Nieves Garrastegui puntualizó que todos los pacientes conocidos con enfermedades crónicas respiratorias deben usar sus medicamentos de prevención. “Debe premedicarse desde ahora. Si ya tienen un plan trazado con su médico, tengan reserva de terapia respiratoria como para un mes. Lo que se avecina no será fácil”, puntualizó.