La agricultura busca levantarse: Tras duro golpe de fenómenos atmosféricos

09 Nov
El agrónomo Carlos Flores, secretario de Agricultura. (Foto/Suministrada)

Vicente Toledo Rohena
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SAN JUAN – Los huracanes Irma y María castigaron sin clemencia la agricultura. En conversación con el secretario de Agricultura, el agrónomo Carlos Flores, no se salvó ningún renglón agrícola del castigo de los devastadores sistemas.

El café, plátano y guineo se tendrá que importar.”

“Los estimados que hicimos del impacto del huracán Irma ascendieron a 45 millones de dólares en pérdidas, en lo que es actividad agrícola. Fue un golpe duro… pérdidas de plátanos, papaya y otros productos. Ahora, el huracán María cambió la situación y todo el panorama, al sumar sobre 200 millones de dólares a lo que corresponde a la actividad agrícola… pero también hay que sumar 1.8 billones de dólares en infraestructura agrícola”, enumeró Flores.

“Ranchos de pollos se vinieron abajo, vaquerías perdieron los techo… cafeteros perdieron estructura y maquinaria; sistemas de riego, los caminos a las fincas, cercas y otros. Para dar una idea más clara, el monto total de infraestructura en Puerto Rico se estima en 4.6 billones de dólares; y perdimos 1.8 billones de la agricultura sobrepasan los 2 billones de dólares”, explicó.

Prácticamente en todos los renglones la agricultura sufrió pérdidas. Entre 50 a 90% en muchos de los renglones. En cuanto a los plátanos, la pérdida fue casi en su totalidad. Es menester recordar que tanto el plátano como los guineos son muy vulnerables a los vientos.

En el caso del café, se registró una pérdida enorme en la cosecha, debido a que precisamente, comenzaba la cosecha.

“En las zonas bajas comienza cosecha en agosto; en la zona de medianía en septiembre; y la zona alta en octubre. Lo triste es que esta era la mejor cosecha que se venía estimando en los pasados 10 o 15 años. Había la proyección de tener la mejor cosecha en mucho tiempo. Había un renacer en la industria cafetalera”, dijo el secretario.

María acabó con la mitad de los árboles que van a tener que ser remplazados. En el caso del café la recuperación es más lenta que en otras cosechas.

Se asegura que en cuanto al plátano y guineo en siete u ocho meses tendrán producción de vuelta. Los agricultores ya levantaron su semilla y se ve el resultado en menos de un año. Pero el café toma más tiempo, de unos cuatro a cinco años.

El café, plátano y guineo se tendrá que importar. Flores dijo que ya se envió personal a Costa Rica a visitar fincas y trabajar con la seguridad que de donde se traigan los productos, sea zona libre de enfermedades o plagas que puedan afectar a Puerto Rico.

“Lo que son las zonas costeras, 51,000 cuerdas de terrenos agrícolas quedaron bajo agua. Los ríos se salieron de su cauce e inundaron plátanos las siembras, todo lo que estaba en las costas. Zonas de pastoreo se afectaron mucho, el ganado se, lo llevó el río. Se vivieron unas situaciones bien complejas”, explicó.

Sobre el sector de las aves, dijo que las estructuras se vinieron abajo. Más de 2 millones de pollos se perdieron, creando una situación bien difícil en este renglón.

“Con la declaración de zona de desastre del presidente Donald Trump, entran una serie de ayudas y programas federales, que son los mismos que aplicarán para Florida, Texas e Islas Vírgenes. Me comuniqué con el secretario de Agricultura de Estados Unidos, Sonny Perdue, para hablarle de la situación crítica de la agricultura local y nos aprobó los mismos programas con las mismas condiciones  que cualquier estado. Son con las que estamos trabajando para ayudar a nuestros agricultores. También Perdue, envió personal adicional para asistir a las agencias federales, para canalizar las ayudas y otros programas diseñados para asistir a los agricultores”, señaló el secretario.

Sobre el sector ganadero informó que está operando con la mitad de la producción, al igual que muchos agricultores. Uno de los primeros programa en aprobarse fue los 12 millones de dólares para el sector ganadero de leche; con el fin de dar por 30 días el alimento concentrado, para mejorar la nutrición del ganado de línea de ordeño y mantener la producción. En este momento en que no hay energía eléctrica en muchos sectores, la industria lechera está desviando todos sus esfuerzos a lo que es la leche de cajita (UHT).

Flores abundó que otros sectores como la apicultura se trabajan con programas noveles para ayudar en estas áreas. Habló sobre la colaboración de la industria privada que donó una cantidad sustancial de azúcar, la cual se unió a otros esfuerzos colaborativos para brindar a los apicultores azúcar y barras de proteínas, con la meta que puedan preparar la mezcla y suplementar con alimento en lo que puede haber más polinizadores. Durante una reunión en Gurabo, se reunieron los apicultores para recibir información sobre los  programas de asistencia inmediata disponible.

Sobre  la industria porcina, el secretario aseguró que tendremos el sabroso lechón para Navidad. Las mayores pérdidas en esta área fue de infraestructura; y en cuanto las hermosas Pascuas, también fue enfático en garantizar su presencia. “Si hay que pagarlas un poco más cara, recuerden que son sobrevivientes de dos huracanes…”, terminó diciendo Flores.