“Los puertorriqueños son ciudadanos de los Estados Unidos que merecen apoyo y compasión ante el desastre, y este financiamiento federal es imperativo para garantizar que la Isla se reconstruya mejor que nunca. Exhortamos al Congreso a que deje de retrasar esta importante solicitud, que asuma la responsabilidad y que apruebe de inmediato este financiamiento crítico”, dijo el gobernador Cuomo.

Por su parte, Rosselló Nevares sostuvo que con la ayuda de Nueva York y otros socios, la isla está en el camino hacia la recuperación después de los huracanes María e Irma, a pesar que aún hay una cantidad monumental de trabajo por hacer.

“Hacemos un llamado al Congreso para que reconozca al Pueblo de Puerto Rico como ciudadanos iguales de los Estados Unidos y tome medidas para brindarnos la ayuda que necesitamos desesperadamente. Agradezco al gobernador Cuomo y a la delegación de Nueva York por su colaboración en nuestra defensa y por todo su trabajo para ayudar al pueblo de Puerto Rico”, dijo el mandatario.

Aprovechando los esfuerzos del estado de Nueva York, así como líderes empresariales y de organizaciones sin fines de lucro llevaron a cabo una evaluación de daños e identificaron recomendaciones específicas de financiamiento para reconstruir un Puerto Rico más fuerte y resistente. Los hallazgos del informe indican que más de 472,000 unidades de vivienda fueron destruidas y fuertemente impactadas; cientos de miles de puertorriqueños se han ido para buscar albergue en refugios o casas de familiares y amigos; el sector agrícola fue destruido casi por completo —lo que incluye la pérdida de casi el 80 por ciento del cultivo plantado— y casi toda el agua y las aguas residuales se volvieron inoperantes.

El informe además indica que la amplitud y profundidad de esta devastación presenta una oportunidad para “comenzar de nuevo” y repensar el diseño de los principales componentes de la infraestructura de la isla, invertir en la calidad y resistencia de sus viviendas y edificios públicos, y modernizar la forma en que se proveen los servicios básicos a los residentes.

El plan se enfoca en tres áreas de asistencia:

• Programa de Asistencia Pública (Public Assistance Program)
• Programa de Subvención de Mitigación de Riesgos (Hazard Mitigation Grant Program)
• Subsidio en Bloque para Desarrollo Comunitario (Community Development Block Grant)

Dentro de estas áreas, el plan identifica los impactos sectoriales con inversiones estratégicas y específicas para reconstruir más fuerte y mejor. El informe completo está disponible aquí.

• Vivienda – $31 mil millones
• Red eléctrica y resiliencia- $17.8 mil millones
• Agricultura – $2 mil millones
• Servicios Sociales – $288 millones
• Desarrollo económico – $3.2 mil millones
• Infraestructura de comunicaciones – $1.5 mil millones
• Carreteras y puentes – $4.5 mil millones
• Puertos y aeropuertos – $1.4 mil millones
• Revitalización de edificios públicos – $153 millones
• Instalaciones de agua y control de agua – $1.3 mil millones
• Alcantarillado sanitario y drenaje – $1.4 mil millones
• Educación y escuelas – $8.4 mil millones
• Medioambiente y recursos naturales – $1.6 mil millones

Junto con 487 millones de dólares para seguridad pública y primera respuesta y 9 mil millones de dópara la gestión de recuperación a largo plazo, la necesidad total de financiación es de 94.4 mil millones de dólares.