Por: Redacción Presencia
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CAROLINA- Los Gigantes de Carolina están necesitados de una reacción urgente, luego de caer 2-1 y 6-0 en sus dos encuentros de la serie semifinal de la División del Atlántico del Béisbol Clase A ante los Brewers de Sabana Seca de Toa Baja, como parte de la acción del Carnaval de Campeones celebrada en el Estadio Ángel “Boto” Melecio de Toa Baja.
Carolina vio como sus aspiraciones de conseguir el cetro del torneo organizado por el Departamento de Recreación y Deportes Estatal recibieron un duro golpe en un domingo en el que no pudieron responder con el madero.
A primera hora, el encuentro fue un verdadero duelo de lanzadores entre el abridor de Carolina, el derecho José Ríos y el estelar zurdo de Sabana Seca, Edgard Morales, quienes estuvieron dominantes desde la lomita durante todo el duelo.
Morales salió por la puerta ancha al lanzar siete entradas en las que permitió dos indiscutibles y una carrera, superando a Ríos quien solo permitió dos carreras en seis episodios lanzados.
Osvald Martínez de 3-3 y Michael McDougal de 3-2 fueron los mejores por la ofensiva de Sabana Seca, en un juego en el que los inatrapables estuvieron escasos.
Carlos Esquilín fue el mejor bateador de los Gigantes al irse de 3-2.
A segunda hora, el pitcheo de Sabana Seca volvió a dictar el ritmo del encuentro con un Axel Rodríguez que retomó las cosas donde su compañero Edgard Morales las dejó, ya que Rodríguez lanzó seis entradas en las que ponchó a seis bateadores y permitió un solo inatrapable.
En este encuentro Alberto Olmedo bateó de 3-2 con dos anotadas y el profesional Ángel Colón conectó un jonrón solitario por el equipo triunfador, quienes tomaron venta de 2-0 sobre los Gigantes.
El lanzador y coapoderado de los Gigantes, Raúl “Rudy” Colón, comentó sobre la pobre ofensiva que exhibió su equipo durante los desafíos ante Sabana Seca.
“Entiendo que la inactividad de un mes sin jugar nos afectó. No quiero poner excusas, pero los juegos de práctica no se juegan con la misma intensidad que los juegos de playoffs. No tuvimos ofensiva de ninguna clase en los primeros juegos, y creo que los muchachos estaban ansiosos por lucir y no pudimos descifrar sus pitcheos”, declaró Colón.
El próximo domingo, 28 de septiembre, los Gigantes estarán obligados a superar a los Brewers si es que quieren mantenerse con vida en la serie, y Colón espera que en el parque Doble A Roberto Clemente de Carolina, la novena de la Ciudad de Gigantes salga airosa.