Paralizadas obras de la AAA

10 Nov

Por Jaime Torres Torres
Especial para Presencia

FAJARDO – Descargas sanitarias que, en la presente temporada de aguaceros, discurren por las cunetas de Las Croabas y desembocan en el litoral del Balneario Seven Seas; una deuda de alrededor de $3, 400 millones con los bonistas; otra de $120 millones a suplidores y desarrolladores; obras de infraestructura paralizadas por falta de dinero y un cuadro de incertidumbre administrativa a raíz de la llegada de la Junta Federal de Control Fiscal mantienen en una situación de precariedad a la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados (AAA) no solo a nivel regional, sino en toda la Isla.

(Foto/Suministrada)
(Foto/Suministrada)

Así lo reveló la ingeniera Adamaris Quiñones, directora de infraestructura de la corporación pública en el área Este. “El programa de mejoras capitales se ha visto grandemente afectado. A nivel Isla teníamos una serie de proyectos con las plantas de filtración, alcantarillados y las estaciones de bombas y muchos de esos proyectos fueron suspendidos. Es una reacción en cadena. No solo sufren la agencia y nuestra gente sino también los contratistas, los suplidores de equipos y materiales y nuestros consultores. Es un impacto significativo”, dijo en declaraciones exclusivas para Presencia.

El sistema de alcantarillado en Las Croabas se pudo adelantar poco más del 85% en gran parte de la PR-987. La troncal sanitaria que se extiende del área de varadero hasta la entrada del Fideicomiso de Conservación se completó, al igual que en las inmediaciones de la estación de bombas, pero únicamente sirve al Balneario Seven Seas.

“Aun no sirve en la comunidad y demás sectores del proyecto porque queda por instalar el tramo que está entre la entrada de Seven Seas hasta el Fideicomiso. Este proyecto va dirigido a atender una situación de salud pública. Los residentes y comerciantes cuentan con pozos sépticos. Hay unos bien mantenidos y otros no. En la medida en que no sean mantenidos y atendidos en forma frecuente redunda en desbordes sanitarios hacia las calles y eso eventualmente llega a los sectores pluviales y en algún punto al mar”, explicó la ingeniera Quiñones al detallar que la subasta original ascendió a $7.6 millones y posteriormente aumentó a $12.8 millones.

Los trabajos por completar conllevarían una inversión de $1.5 millones. No es cierto, como se alega, que el municipio de Fajardo, que opera con un superávit, haya aportado un millón para finalizar la obra.

“Cuando tuvimos que terminar el contrato, nuestro contratista no había podido terminar los trabajos de asfalto en Seven Seas. El municipio sí hizo una instalación de asfalto, pero más allá de eso no ha habido una aportación monetaria para la terminación del proyecto”.

A corto plazo, el futuro de la AAA dependerá de la Junta Federal de Control Fiscal. Se espera que próximamente el presidente de la corporación pública, ingeniero Alberto Lázaro presente su informe a la Junta sobre las prioridades y la urgencia de nuevas fuentes de financiamiento.

Aunque se aprobó la Ley de Revitalización Fiscal de la AAA, ante la llegada de la Junta, la AAA tendrá que esperar por la aprobación de la emisión de $1, 100 millones.

Lo peor que podría suceder, no obstante, es que los proyectos sigan paralizados por tiempo indefinido. Quiñones aseguró que la calidad del preciado líquido no se afectará y que, por lo pronto, no se consideran aumentos a la tarifa.

“Las aguas potables que se sirven siguen en curso. Es un aspecto que se maneja a nivel operacional con nuestro personal por lo que las personas no se deben preocupar por la calidad del tratamiento del agua potable y seguimos con el cumplimiento de las disposiciones de EPA, la Junta de Calidad Ambiental y el Departamento de Salud. Lo que sí se afecta es el proyecto de mejoras capitales. El aumento a la tarifa sería la última opción. Es algo que se evaluará en su momento”.

Otros proyectos paralizados son la primera fase de la nueva planta del Río Valenciano en Juncos, a un costo de $33 millones, con un 55% de adelanto en su construcción, así como mejoras a la represa de Cidra, la planta de Puerto Nuevo en la Región Metro, y a sistemas sanitarios en plantas en el Oeste y en Vega Baja y Camuy, entre otros pueblos.