Por confirmar vínculo de auto hallado en Levittown con doble asesinato en calle Loíza

12 Mar
(Foto/Archivo)

SAN JUAN – El teniente José Cruz Marrero, director de la División de Homicidios del Cuerpo de Investigaciones Criminales (CIC) de San Juan indicó el martes que la pesquisa por el doble asesinato ocurrido en la calle Loíza en Santurce, sigue avanzando y que ocuparon un carro supuestamente vinculado al caso.

“Luego de 18 horas de investigación que están en continuación, se ha realizado un sinnúmero de entrevistas, entre ellas, al personal que estaba trabajando en el área del negocio. Estamos en el proceso de identificación de personas que estaban en el club. Se han realizado sobre 16 ‘subpoenas’, se ha ocupado un vehículo de interés que estaba relacionado a estos hechos y en el día de hoy se va a realizar una orden de registro y allanamiento”, dijo Cruz Marrero en entrevista radial (WKAQ).

Informes de prensa señalan que una guagua que aparenta ser Mitsubishi, fue encontrada quemada detrás de una farmacia en la Avenida Los Dominicos en Levittown, Toa Baja. Cruz Marrero dijo que se harían las pruebas precisas para confirmar que se trata del vehículo involucrado en el crimen. El auto no aparece reportado como hurtado.

La investigación policiaca arrojó que la balacera ocurrió a las 3:16 de la madrugada del lunes en la que fueron asesinados Henry Alvarado Colón de 25 años, residente de Humacao y Gabriel A. Cochran González, de 23 años y vecino de Villa Palmeras. Ninguno de los occisos tenía antecedentes penales, según el teniente. Otras tres personas resultaron heridas de bala.

“De la investigación que surge y del material fílmico obtenido, no se observa ninguna discusión dentro del local. Esto fue por acecho”, detalló el director de Homicidios, con lo que se descartan versiones iniciales de que hubo una pelea dentro del local.

“Por lo menos, preliminarmente se está investigando como narcotráfico sin limitarse a otros ángulos. El ángulo en el que nos estamos concentrando mayormente es narcotráfico”, agregó.

En la escena del crimen, según Cruz Marrero, se divisaron sobre 20 casquillos disparados de tres calibre diferentes, algunos de ellos de arma larga. Agentes echaban gasolina a su patrulla en una gasolinera cercana, cuando escucharon la ráfaga de disparos. El local abre operaciones desde cerca de las 11:00 de la noche hasta tempranas horas de la mañana.