Reflexión: Escribiendo…

01 Mar

Premier González

Historias comienzan, historias terminan. A todos nos ha tocado vivir la experiencia de una novela televisiva llegar a su final, después de largos días viendo cada episodio. De igual forma, en cualquier servicio de ‘streaming’ nos ha pasado que empezamos a ver una serie y, de momento, llega su fin de temporada o quizás en la lectura de un gran libro llegas a su última página. Es ese el momento de “y ahora que hago” nos ha llegado a todos o quizás es la pregunta de ¿Qué pasará ahora con esta historia? 

Te quiero compartir esto, hace unos 10 años, comenzó un nuevo capítulo en mi historia. En ese capítulo ha sido uno sorprendente, momentos de fe, victorias, derrotas y aún más hermoso, lleno de Dios. Entre algunas de las cosas, Dios decide que es el tiempo de dar comienzo a la aventura pastoral, me trajo a el amor de mi vida, me hizo padre y nuevas puertas profesionales fueron abiertas. Esa es la parte que parece un cuento de hadas, pero en cada paso Dios ha escrito en la historia como llegue hasta ahí. En el pastorado mi carácter espiritual fue probado. En mi noviazgo, más adelante en mi matrimonio, mi carácter como hombre fue probado. Como padre, mi carácter sigue siendo probado cada día y como profesional, tuve que aprender que en los ‘no’ también hay bendición. 

Esto son solo algunos detalles que puedo compartirte de mis últimos diez años. En este instante piensa en tus pasados diez años. De seguro pasaron muchas cosas y cada día que pasa se siguen escribiendo nuevas líneas en tu historia. También, tengo que añadir que hay una historia que dio comienzo hace miles de años y hoy sigue vigente y escribiéndose todos los días. Cuentos, historias, palabras que muchos dirán que el viento se lleva, pero la realidad es que trazan un camino seguro para aquel que ha decidido escribirla de la mano del gran escritor, Dios. Él ha escrito una historia de ti, llena de comedia, drama, suspenso y sobre todo bendición.

Muchas historias han terminado en un final feliz y la tuya puede terminar en ese lugar feliz donde las calles son de oro y el mar es de cristal. Solo dependerá de ti darle paso a tu vida al gran escritor, hoy la historia continuará, pero la decisión del final feliz la tienes tú.