Salud niega muertes confirmadas por leptospirosis

09 Oct

SAN JUAN – La epidemióloga del Estado, Carmen Deseda, informó que no existen casos confirmados por laboratorio de muertes por leptospirosis tras el paso del huracán María por Puerto Rico.

Sin embargo, la epidemióloga hizo énfasis en alertar a la ciudadanía para prevenir el contagio de esta enfermedad, ya que la misma, es muy común en países del trópico, sobre todo luego de episodios de lluvias fuertes, como las que recientemente se experimentan en la Isla.

“En estos momentos, no tenemos ningún caso confirmado, pero no descartamos que se registre alguno, ya que en años anteriores se ha reportado la leptospirosis tras inundaciones y aguas estancadas. Actualmente, se evalúan varios casos, pero aún no se han recibido los resultados de laboratorio”, indicó la epidemióloga, mientras hizo un llamado a ingerir agua embotellada o hervida y utilizar ropa y zapatos protectores cerca de tierra o agua que pueda estar contaminada con orina de animales.

La leptospirosis es una enfermedad infecciosa causada por bacterias que pueden producir infecciones potencialmente mortales de los riñones, el hígado, el cerebro, los pulmones o el corazón. La manera más común de contraerse es al beber o tener contacto con agua que haya sido contaminada por orina o líquidos corporales de animales infectados.

Deseda aclaró que, “esto no es una enfermedad contagiosa que se transmita de persona a persona. Mayormente se adquiere cuando un área de la piel con lesiones expuestas, tiene contacto con aguas que hayan sido contaminadas con orina de animales infectados o a través de la mucosa de la boca”.

Aunque la leptospirosis es una enfermedad que puede causar la muerte, es completamente tratable y, según confirmado por el Departamento de Salud, los hospitales de Puerto Rico cuentan con los medicamentos necesarios para tratarla.

Los síntomas se pueden presentar desde dos días hasta cuatro semanas después de haber estado expuesto a las bacterias. Los más comunes son: fiebre, escalofríos, dolor de cabeza, dolores musculares, vómitos, diarrea, dolor abdominal, sarpullidos y ojos enrojecidos.

De manifestarse estos síntomas, se recomienda ir inmediatamente a un médico que le pueda hacer una prueba para detectar la enfermedad. Si se confirma la infección, es probable que se trate con antibióticos. El tratamiento es más eficaz cuando se inicia lo más pronto posible.