Redacción Presencia
redaccion@box2170.temp.domains
Para muchos, la exigencia de obtener buenas calificaciones viene mucho antes de comenzar estudios universitarios. Si bien es cierto que dar lo mejor de sí es necesario para alcanzar metas, también es indispensable que esto se haga de manera saludable.
Una vez en la universidad, la primera dificultad es el cambio rotundo que existe entre el sistema escolar y universitario. La disciplina es más exigente, demanda una mayor autonomía, responsabilidad y proactividad en su formación.
Algunos alumnos enfrentan su primer año de universidad con absoluta dispersión, y muchas veces este ambiente de mayor “libertad” los hace perder el norte. Otros, por el contrario, toman una actitud de alta autoexigencia que puede provocar el desarrollo de trastornos ansiosos, o incluso depresiones cuando no logran cumplir con sus propios parámetros.
Es por ello, que no se recomienda ninguna actitud de mucha dispersión, ni de mucha exigencia. La universidad si bien es un lugar donde la responsabilidad y la carga de trabajo son mayores, depende fundamentalmente de ellos el obtener o no un buen rendimiento, a través del equilibro entre la parte académica y social.
Cómo manejar el estrés en la universidad
Adelante varias estrategias de Universidad Andrés Bello (Universia Chile) que se pueden emplear para manejar el estrés y la ansiedad en la universidad:
- Practicar deportes y organizar actividades para los momentos de descanso.
- Utilizar melodías permite evadir aquellas situaciones foco de tensión y desplazarse a situaciones de vida más agradables.
- Planificar y organizar; clave durante la etapa universitaria.
- Crear espacios de socialización que vayan más allá de lo académico, pero también es recomendable crear grupos de trabajo para el apoyo en lo académico.
- Si el estrés está provocando demasiadas dificultades, es importante la visita a un especialista que puede detectar un problema mayor.
Fuente: Universia Chile