Un banquete: Décima edición del Festival Internacional del Bolero

03 May
(Foto/Suministrada)

CAROLINA – Una vez más, la Plaza Gigante de la Música se vistió de gala y romance para recibir la décima edición del Festival Internacional del Bolero de Carolina. El pasado sábado, 28 de abril, subieron a tarima exponentes de gran reputación que se han destacado por perpetuar dentro y fuera de Puerto Rico el estilo, tradición y encanto del bolero de manera muy particular.

“A la hora de expresar los sentimientos y emociones más profundas el bolero sigue siendo la alternativa por excelencia. En su honor es que Carolina celebra desde hace ya 10 años, y de forma absolutamente exitosa, el Festival Internacional del Bolero. Agradecemos a todos esos románticos y aquellos que disfrutan de la buena música que se dieron cita y disfrutaron del resto de los atractivos que año tras año presenta este prestigioso evento”, expresó el alcalde José Carlos Aponte.

El evento arrancó con la participación de los estudiantes de la Escuela de Bellas Artes de Carolina, quienes en cada edición demuestran su dominio en la ejecución de este género musical. Contó también con la participación de los románticos de siempre Los Condes; Trío Los Cancioneros; la agrupación Son Divas: así como Lilly y Su Gran Trío.

El plato fuerte de la noche recayó en el recordado salsero Alex D’ Castro y su hijo, Carlos D’ Castro, quienes junto a la Orquesta de Conciertos de Carolina y bajo la dirección del maestro Luis Perico Ortiz, ofrecieron un repertorio lleno de interpretaciones de amor, pasión y nostalgia, con el talento de altura que les distingue.  

Como dato destacado, el festival también honró de manera póstuma la trayectoria de uno de sus más importantes organizadores, el trompetista Elías Lopés García, fallecido el pasado año. Lopés tomó las riendas del Festival, y lo convirtió en un referente ineludible de la música a nivel nacional e internacional. En su honor se develó el busto y la tarja que conmemoran su trayectoria y prestan su nombre a la plaza. 

“Cada año, nos regalaba momentos de incalculable valor, enseñanzas y anécdotas jocosas durante la organización de este evento. Tras su lamentable fallecimiento el pasado año, no podíamos pasar inadvertida su fructífera trayectoria para esta edición del Festival. La música marcó su vida y en su honor, la Plaza Gigante de la Música de Carolina, hogar de este gran evento por los pasados años, lleva su nombre”, explicó el alcalde Aponte.