Viento en popa la reconstrucción el Paseo Julia de Burgos a orillas del Río Grande de Loíza

28 Jan

El proyecto turístico incluye un puente flotante para el uso de los pescadores y visitantes.

(Foto/Suministrada)

LOÍZA – La reconstrucción en Loíza va viento en popa, como lo atestiguan los trabajos en el Paseo Julia de Burgos a la orilla del Río Grande de Loíza. Esta semana, la alcaldesa Julia Nazario Fuentes realizó una de las frecuentes visitas de supervisión y quedó complacida con la rapidez de los trabajos. “Ese es un espacio público que estuvo abandonado por años y lo hemos rescatado como parte de la estrategia de desarrollo económico por medio del turismo y se estima que estará listo a finales de marzo, si todo continúa como hoy”, detalló la Alcaldesa.

Este paseo contará con gazebos donde toda la energía eléctrica necesaria se generará solarmente. Tendremos además un puente flotante para uso de nuestros pescadores y visitantes. Nuestros pescadores han utilizado la zona por décadas y ellos son parte integral de este desarrollo. El puente flotante causará un impacto mínimo en el ambiente y podrá ser fácilmente removido de ser necesario ”, añadió Nazario Fuentes.

Una de las particularidades del Parque es que tendrá cinco monolitos que se han encomendado al desatado artista Jaime Suárez, para que destaque de manera creatica los poemas de la famosa Julia de Burgos y sirva como un homenaje a la destacada poeta. Jaime Suárez es uno de los mejores artistas en este tema y es el creador del famoso totem telúrico que que está en la Plaza del Quinto Centenario en Ballajá, Viejo San Juan.

El proyecto tiene un costo de $436,890, donde el Municipio ha aportado $290,390 y el resto son fondos federales. “La gente se asombra cuando le decimos que la partida federal estaba disponible desde el año 2012 y por falta de diligencia no se habían reclamado. Nuestro centro urbano tiene la particularidad de contar con la Iglesia San Patricio y Espíritu Santo, la tercera más antigua de Puerto Rico, lo que sumado al Centro Cultural, lo que hace una parada importante en el recorrido turístico. Este Paseo se sumará a ese recorrido, al igual que la zona aledaña del ancón, que fue restaurada por los amigos del Estuario de la Bahía de San Juan en julio pasado”.

Por su parte, el arquitecto loiceño Nelson Rivera Rodríguez, quien además es profesor en la Universidad Politécnica en Hato Rey, destacó que el Paseo Julia de Burgos provee para la generación de eventos artísticos, deportivos y culturales para todas las edades. Rivera, destacó la importancia de conservar el centro urbano loiceño e incluso mostró una reproducción de los mapas urbanos de Loíza del año 1823. Una de las particularidades del diseño del proyecto, es que se tomó en cuenta la cercanía del río y que prevee para el manejo de las crecidas del mismo y el flujo natural de las corrientes, tal como lo exige el Reglamento de la Junta de Planificación para zonas suceptibles a inundaciones.

“Lo importante es no impedir el flujo de las aguas”, añadió el arquitecto Rivera. Incluso, toda la vegetación de la zona es autóctona, que soporta mejor las inclemencias del tiempo, particularmente mangle de botoncillo y uva playera. “Hemos trabajado este proyecto con mucho cuidado y detalle para que sirva a nuestro pueblo por muchos y sea parte del renacer de Loíza”, finalizó Nazario Fuentes.