Alegan rápida recuperación de cooperativas

13 Nov
José Julián Ramírez director ejecutivo de la Asociación de Ejecutivos de Cooperativas (ASEC). (Foto/Suministrada)

SAN JUAN – Cuando el país apenas comenzaba a reconocer los efectos dejados por el huracán María, muchas cooperativas de ahorro y crédito activaron sus operaciones para proveer dinero en efectivo y servicios a sus socios casi de inmediato. Así se desprende de un estudio encomendado por la Asociación de Ejecutivos de Cooperativas (ASEC), según indicó el director ejecutivo, José Julián Ramírez.

“Este estudio lo que confirma es que el personal de nuestras cooperativas de ahorro y crédito, cónsono con su misión, actuó con diligencia y en solidaridad, aun cuando muchos estaban lidiando con las adversidades propias de la emergencia y la sola apertura de las sucursales constituía un gran reto”, expresó en un comunicado.

Indicó que el estudio concluyó que en promedio, la mayoría de las sucursales reanudó operaciones a 48 horas del paso del huracán. A pesar de la falta de electricidad y sin sistemas de comunicación en casi todo el país, sobre el 56 por ciento de las cooperativas tuvieron la capacidad de ofrecer todos o la mayoría de los servicios en horario especial, comprobó el estudio realizado por la firma de consultoría en gerencia y recursos humanos T&T Management Group.

“Las cooperativas de Puerto Rico, en su mayoría, comenzaron sus operaciones en horarios especiales, que en promedio superaron el 60 por ciento de sus horas regulares de funcionamiento y activaron sobre 88 por ciento de su fuerza laboral”, indica el informe publicado por ASEC.

Ramírez sostuvo que al cumplirse un mes del paso del huracán, ya el 94 por ciento de las más de 260 sucursales cooperativas estaban operando.

Además, indicó que la gestión de las cooperativas en municipios distantes o, incluso, incomunicados, ayudó a que más ciudadanos tuvieran acceso al dinero en efectivo indispensable para satisfacer las necesidades básicas de alimentos, medicinas y gasolina. Relató que, al día siguiente del huracán, los supervisores de algunas cooperativas inundadas llegaron a sacar lodo para poner a funcionar sus sucursales. Otros colaboraron abriendo caminos para que pasaran los camiones blindados que llevaban el efectivo a los socios y clientes.

El ejecutivo reconoció el compromiso de los cerca de cuatro mil empleados y ejecutivos del sistema, pese a que alrededor de 30 por ciento de estos sufrió algún tipo de pérdida. Las cooperativas han desarrollado programas de ayuda económica directa a sus empleados, de distribución de provisiones, agua, hielo y gasolina.  Sobre el 70 por ciento han buscado garantizar y pagar las jornadas completas. 

“Históricamente, el movimiento cooperativo ha sido consistente en abrirse paso en medio de las crisis. Ahora, seguimos de pie y cerca de nuestra gente, con la misma esperanza de que, una vez más, podremos recuperarnos y con el compromiso de seguir aportando a levantar la economía de Puerto Rico”, manifestó el director ejecutivo de ASEC.