(Foto/Archivo)
SAN JUAN – Luego de meses de trabajo sin interrupción y muchas modificaciones para continuar con las operaciones esenciales, el sector de la manufactura se siente complacidos y esperanzados por la relevancia que el gobierno de Puerto Rico ha dado a la Industria al incluirla en la fase 1B del proceso de inmunización contra el COVID-19.
Según Carlos M. Rivera, presidente de la Asociación de Industriales, esto pone a la isla en una excelente posición dado que cumple con la meta de asegurar la continuidad de la manufactura de productos esenciales para la salud, evidenciando el compromiso del gobierno con el sector. Por otro lado, convierte a Puerto Rico en un país atractivo para aquellas industrias que están considerando mover sus operaciones.
Desde el comienzo de las órdenes ejecutivas la Asociación puso énfasis en demostrar al gobierno lo preparadas y confiables que son las operaciones de manufactura y la importancia de mantener estas operaciones abiertas ya que suplen a nivel mundial medicamentos y equipo médico para atender la pandemia.
La manufactura ocupa uno de los primeros lugares en orden de importancia en la economía de un país. En Puerto Rico representa el 50% del producto interno bruto, sobre el 30% de ingresos al Fondo General y es un eslabón fundamental para la estabilidad y seguridad en estos momentos de pandemia. Tiene un rol importante en la cadena de suplido, ya que hay productos que no se pueden dejar de producir por que pueden causar un impacto adverso para atender condiciones de salud de la población, especialmente los manufacturados en Puerto Rico ya que son para suplir las necesidades mundialmente. Puerto Rico produce 8 de los 15 medicamentos más vendidos en el mundo y tiene presencia de 6 de las 10 empresas de dispositivos médicos de mayor venta a nivel mundial.
En la isla por la importancia del sector industrial el Departamento de Salud comenzó una iniciativa novel para certificar empresas de manufactura como centros de vacunación para los empleados del sector. Desde octubre del año pasado, el Departamento de Salud ha estado en comunicación directa con la Asociación de Industriales de Puerto Rico para coordinar con las empresas, la educación y orientación para certificarse como centros de vacunación. Durante este tiempo, la Asociación ha apoyado a las compañías para que tengan su certificación y estén listas para comenzar la inmunización, y los ha mantenido informados del progreso de las fases de vacunación. Esta labor en conjunto va a ayudar a que la vacuna llegue a un gran número de empleados, pues el sector de manufactura en Puerto Rico representa sobre 70,000 empleos directos y sobre 210,000 empleos indirectos.
La capacidad de manejo de protocolos, los estrictos estándares de calidad y los sistemas de seguridad en el área de salud de las instalaciones, son la base para que se haya determinado crear estos centros de vacunación. Estas facilidades de manufactura ya tienen que cumplir con unos estándares de calidad estrictos para el día a día de sus operaciones por lo que las hace un lugar idóneo para establecer estos centros de vacunación.
“Nos sentimos bien confiados que el sector de manufactura va a hacer una gran labor y nos va a ayudar a dar visibilidad alrededor del mundo en cuanto a la importancia del sector de la manufactura puertorriqueña,” mencionó Yandia Pérez, vicepresidenta ejecutiva de la Asociación.