Si tus pequeños tienen menos de 5 años y, en especial, menos de dos años de edad, existen algunos aspectos de su desarrollo que todavía no están listos para combatir la influenza eficazmente.

No permita que su hijo comparta alimentos o bebidas con otras personas.”

Al igual que el cuerpo, el sistema inmunológico de los niños muy pequeños se sigue desarrollando hasta que llegan a la adolescencia. Esto no significa que tu hijo no cuenta con ninguna defensa contra los gérmenes, sino que no tienen la misma fuerza inmune que tú tienes. Por lo mismo, si entran en contacto con el virus de la influenza, es probable que no tengan la fortaleza para combatirlo por ellos mismos.

Durante la temporada de influenza, miles de niños son hospitalizados por la enfermedad. Además de que los niños sean más propensos a enfermarse por la falta de desarrollo de su sistema inmune, esto también significa que tardarán más tiempo en curarse. Por lo tanto, es necesario vacunarlos antes de que la temporada comience.

Los medicamentos antivirales para tratar la influenza dan mejores resultados si se administran dentro de los primeros 2 días (48 horas) de contraer la enfermedad. Es posible que el médico le recete medicamentos antivirales a su hijo incluso después de las 48 horas desde que comenzaron los síntomas de la influenza, en especial si su hijo está hospitalizado o tiene más posibilidades de desarrollar enfermedades graves a causa de la influenza.

Las personas tienen fiebre cuando su temperatura es igual o mayor de los 100 grados Fahrenheit (37.8 grados Celsius). Si no tiene un termómetro, toque la cara de su niño. Si la cara está más caliente de lo normal, enrojecida, sudando o si el niño tiene escalofríos, es posible que tenga fiebre

Si su hijo tiene fiebre, hay medicamentos que pueden ayudar a bajarla. Estos se venden en tiendas (sin receta) y se pueden comprar sin dificultad. Otros requieren una receta del médico. Hable con su médico para averiguar que medicamento es indicado según la edad de su niño.

Existen medicamentos que se venden en tiendas (sin receta) que pueden aliviar los síntomas de la influenza en los niños. Consulte con su médico para averiguar cuáles de estos medicamentos son los adecuados para su hijo. Tenga en cuenta que nunca debe darle aspirina a los niños que puedan tener influenza.

Para reducir el contagio de la influenza, su hijo debe permanecer en su casa al menos 24 horas después de que la fiebre desaparezca, excepto para recibir atención médica.

Los niños pueden regresar a la escuela 24 horas después de que la fiebre desaparezca sin el uso de medicamentos antifebriles.

Mientras su hijo está enfermo, asegúrese de que descanse bien y beba líquidos transparentes (como agua, caldo, bebidas para deportistas, bebidas electrolíticas para bebés, Pedialyte) a fin de evitar la deshidratación.

Mantenga al niño enfermo en una habitación apartada el mayor tiempo posible para limitar el contacto con las demás personas del hogar que no están enfermas. No permita que su hijo comparta alimentos o bebidas con otras personas.

Además, trate de que sea solo una persona la que cuide principalmente al niño enfermo. En lo posible, la persona encargada de la atención no debe ser alguien que corra un alto riesgo de sufrir complicaciones graves a causa de la influenza, como mujeres embarazadas o personas con enfermedades crónicas como el asma o la diabetes.

Fuente: www.cdc.gov