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CANÓVANAS – Agentes, adscritos al distrito de Canóvanas, investigaron preliminarmente, ayer, una querella de fraude en la urbanización Country View, del mencionado municipio, donde una mujer reportó haber sido estafada con el falso secuestro de su hija.

Según la Uniformada, alegó la querellante que, el 11 de agosto, a eso de las 1:20 de la tarde, recibió una llamada telefónica donde le indicaron que tenían a su hija secuestrada ya que alegadamente se había metido en un lio.

La Uniformada precisó que la perjudicada alegó que le pidieron la suma de 5,000 dólares, pero al final transaron por 2,500 dólares, los cuales tenía que dejar en el pueblo de Manatí. La mujer, en su desesperación, acudió a un banco en Dorado donde retiró 2,000 dólares y después pasó al cajero automático de la misma institución bancaria donde sacó otros 500 dólares.

Posteriormente, a eso de las 3:30 de la tarde, dejó el dinero en un sobre al lado de un contenedor (dumper) de basura en Walmart de Manatí. Una vez entregó el dinero, la mujer contactó a su hija y la misma se encontraba en buen estado y nunca había sido secuestrada, por lo que la perjudicada decidió avisar a las autoridades lo que le sucedió.

Este caso lo investigó el agente Ricardo Irizarry, del distrito policiaco, y lo refirió a personal de la división de Propiedad y Fraude del Cuerpo de Investigaciones Criminales (CIC) de Carolina.