TRUJILLO ALTO – Ariel Torres Meléndez, presidente de la Corporación para la Defensa del Poseedor de Licencia de Armas de Puerto Rico (CODEPOLA), reiteró hoy su compromiso en un esfuerzo colaborativo para diseñar un programa de adiestramiento práctico y teórico sobre cómo manejarse ante un incidente de tirador activo dentro de un plantel escolar o sus alrededores.

“En CODEPOLA, mantenemos nuestra disponibilidad para reunirnos con el Secretario de Educación y el Departamento de Seguridad Pública para lograr un acuerdo de colaboración y poder ayudarles en esta faena”, expresó.

Torres Meléndez destacó que varios miembros de CODEPOLA, que son maestros del sistema de educación pública, hablaron bajo anonimato por temor a represalias. “Me dijeron que no se sentían seguros y mucho menos preparados para manejar una situación de tirador activo en sus escuelas. Que era una falta de respeto ofrecerles este curso online por falta de recursos, cuando todos sabemos que hay personal diestro en Puerto Rico disponible para ayudar al Departamento de Educación”, resumió. 
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Relató que CODEPOLA estuvo llevando charlas de tirador activo a diferentes escuelas en Puerto Rico tanto por iniciativa propia como por petición de maestros que tramitaban los permisos con el Departamento de Educación, en ánimos de ser parte de la solución, hasta que el Departamento comenzó a hacer lo propio de manera virtual. “La situación ahora es que maestros de Aguadilla, Río Grande y otros municipios se me han acercado para solicitarnos que llevemos el Seminario Tirador Activo que ofrecimos en la Convención CODE2023 en Guayanilla para los socios, que es el mismo servicio educativo que estuvimos brindando en las escuelas, totalmente libre de costos”. 

Aunque reconoció que el Departamento de la Policía “está corto de personal”, de la misma forma el propio Departamento de Educación, Torres Meléndez enfatizó que estamos en un momento histórico, donde “todos debemos unir esfuerzos en el afán de proveer las herramientas necesarias a los maestros, al personal no docente y a los propios estudiantes en los planteles escolares para salvaguardar sus vidas en caso de enfrentar un incidente de tirador activo”. 

Dijo que los maestros que han criticado el taller virtual ofrecido por el Departamento de Educación insistieron en que “no funciona porque no pueden interactuar y ruegan a Dios porque no les toque enfrentar un incidente de tirador activo” en el plantel escolar. 

El incidente más reciente ocurrió el pasado viernes frente a la Escuela Superior Ángel P. Millán Rohena en el barrio Canovanillas en Carolina. “Aquí está pasando de todo y nadie debe esperar a que ocurra una desgracia. Desde estudiantes llevando juguetes que aparentan ser un arma de fuego y no lo son, hasta casos con armas de fuego en manos de menores que se las han robado a sus padres; adolescentes que custodian armas de los maleantes del bajo mundo 24/7 y entran a los salones porque es su trabajo, así como amenazas entre gangas, por celos y revanchas entre estudiantes. Por eso llevamos meses brindando apoyo a quien lo solicita y estamos en la mejor disposición de ayudar en este esfuerzo al Estado”, concluyó Torres Meléndez.