(Foto/Suministrada)

LOÍZA – La alcaldesa de Loíza, Julia Nazario Fuentes, celebró la ceremonia de primera piedra del proyecto de reconstrucción de la plaza pública don Ricardo Sanjurjo de Jesús, como parte del circuito de proyectos de reconstrucción que se están llevando a cabo en las comunidades loiceñas. 

“Como bien sucede en todos los pueblos puertorriqueños y en muchas partes del mundo, la plaza pública es el centro donde se promueve el encuentro entre los ciudadanos, se celebran actividades culturales, artísticas, religiosas y educativas. Por eso es tan importante que nuestra gente tenga unas unas facilidades en buen estado. Por eso estamos iniciando esta remodelación hoy”, detalló Nazario Fuentes.

El proyecto, valorado en $586,303.73, es financiado con fondos federales Community Development Block Grants (CDBG), de la Agencia Federal para Manejo de Emergencias (FEMA, por sus siglas en inglés) y municipales, bajo el cuidado del contratista Capital Projects Corporation. Para iniciar el proceso, se completaron todos los procesos de permisos, sobre todo lo relacionado al permiso otorgado por el Instituto de Cultura Puertorriqueña (ICP), dada la antigüedad del centro urbano de Loíza, municipio que ya supera los 300 años de fundación.

Las labores culminarán con un un nuevo pabellón que funcionará como tarima para usos múltiples, así como la instalación de un nuevo sistema de luminarias, reparaciones en las superficies de las losas y conversión en paseo peatonal de la calle Carlos Escobar, entre la plaza y la histórica iglesia Espíritu Santo y San Patricio. Además, se remozará la famosa fuente que por décadas fue una atracción por su diseño y juego de aguas en movimiento.

La plaza lleva el nombre de Sanjurjo de Jesús, uno de los líderes del Movimiento Cívico Pro Restauración del municipio.  Aunque su historia como pueblo data de siglos de luchas, la municipalidad de Loíza estuvo establecida en uno de sus barrios, llamado Canóvanas desde el 1911 hasta el 1970. Luego, el gobernador don Luis A. Ferré firmó la Ley 149 del 30 de junio de 1969, restaurando el municipio al centro urbano como hoy lo conocemos, creando además el Municipio de Canóvanas. 

Dicho logro de los loiceños no fue algo fácil de trabajar y de ahí que el puente sobre el Río Grande de Loíza, a la entrada del pueblo, fue bautizado como Puente de los Restauradores por la alcaldesa Nazario Fuentes en noviembre de 2019. La estructura conecta al barrio Torrecilla Baja con el barrio Pueblo, a través de la carretera PR-187.